martes, 24 de marzo de 2009

NO HAY "CRISIS"




La “crisis” económica que estamos viviendo hoy en día tiene un gran componente sicológico.


Cada que los medios de comunicación hablan más de la crisis, cada que nuestros amigos y compañeros ahondan más sobre el tema de la crisis y afirmen “estamos en crisis”, estas palabras se replican por todo el mundo.



Al convertirse en el único tema de conversación comenzamos a comportarnos en “crisis”, tomamos decisiones bajo esa premisa, nos comportamos bajo esa premisa, hablamos bajo esas premisas y todo a nuestro alrededor comienza a girar bajo el tema de la crisis, ocasionando que realmente se incremente la “crisis”.



Por esta situación empezamos a tomar medidas autoproteccionista, dejamos de consumir, dejamos de invertir, en otras palabras, dejamos de darnos gusto, esto ocasiona que no se dinamice la economía, que pierda su flujo normal, y por ende se acreciente la “crisis”.



Veámoslo con un ejemplo:



Uno de mis amigos pensaba realizar una inversión en un apartamento con la idea de arrendarlo y obtener un ingreso mensual adicional. Debido a la “crisis” decidió no invertir en el inmueble, tomó como argumento la incertidumbre de la economía mundial.



Al no comprar el apartamento se desencadenaron los siguientes acontecimientos:




  • Ingresó menos dinero a la constructora y por ende se dejaron de realizar nuevos proyectos de construcción.


  • Al no desarrollar nuevos proyectos, por un lado hay más desempleo y por otro se deja de comprar cemento, acero, entre otras materias primas indispensables para la construcción.


  • Lo anterior constituye una disminución en las ventas de las empresas proveedoras de estos insumos para la construcción.


  • Al haber menos ventas de insumos, esto ocasiona que por economía de escala las empresas proveedoras tengan menos utilidades, lo cual genera más despidos y menos inversión.


Como vimos anteriormente, se ocasiona un efecto dominó, debido a que la economía se encuentra enlazada a varios eslabones de una cadena, es decir, que nuestros pensamientos y decisiones de “crisis” sólo atraen y generan más “crisis”.



Hace unos días escuché a un economista hablando sobre la mejor manera de salir de la “crisis”, él afirmaba que si todos volvemos a nuestros hábitos normales de consumo y dejamos de tomar medidas proteccionistas podemos acabar con la “crisis”.El periodista que lo entrevistaba confirmó la posición del economista, pero después afirmó que era imposible realizarlo porque somos incapaces de ponernos todos de acuerdo.



Me parece que todos juntos podemos crear una conciencia colectiva y comenzar a generar una solución a la “crisis” desde cada uno de nosotros y no permitir que un efecto mediático agrave más la supuesta “crisis” en la que nos encontramos.



Cuando aceptamos que la “crisis” no es más que un asunto sicológico podemos darle una solución desde nosotros mismo sin necesidad de esperar una medida del gobierno que nos aliente y cree confianza.Creemos nosotros mismos la confianza y de esta forma comencemos a darle una solución a la “crisis”, esta solución está en cada uno de nosotros.Uno de los grandes problemas del hombre posmodernista es el apego a los paradigmas, NADIE QUIERE ESTAR EN CRISIS PERO TODOS LOS DÍAS DECIMOS QUE ESTAMOS EN CRISIS.

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